Cuando se hace referencia al mantenimiento del coche normalmente acude a nuestra mente la imagen de las revisiones mecánicas. Sin embargo, la limpieza también es un aspecto esencial para prevenir el desgaste de algunos de los componentes del coche. De hecho, limpiar con frecuencia el vehículo no solo le aporta un valor desde el punto de vista estético sino que incluso se podría considerar como una operación de mantenimiento.
Consejos para lavar el coche
Aunque puede parecer una tarea muy sencilla, limpiar el coche no solo requiere cierta habilidad sino también algunos conocimientos básicos para no causarle daños que después deberemos reparar. Algunos consejos básicos y muy fáciles de seguir son:
- Lavar el coche en una estación que posea un sistema de lavado a presión mediante osmosis inversa. De esta forma podrás estar seguro de que el agua está descalcificada y no dejará manchas en la carrocería.
- Si lavas el coche con una manguera a presión, recuerda que esta siempre debe utilizarse de forma perpendicular a la carrocería, con movimientos de abajo hacia arriba. Además, se recomienda que la presión no supere los 100 bares.
- No olvides limpiar cuidadosamente los faros, las lunetas y, sobre todo, las escobillas ya que en estas últimas pueden quedar restos de suciedad que terminarán rayando el parabrisas.
- Cuando vayas a limpiar el salpicadero y todas las superficies plásticas en el interior del coche, evita el uso de productos que contengan disolventes ya que podrían ejercer un efecto corrosivo sobre el plástico.
- Para limpiar la tapicería, pasa con frecuencia una aspiradora y, de vez en cuando, utiliza espuma seca y un cepillo para eliminar las manchas y limpiar en profundidad. En caso de que tengas una tapicería de cuero, se recomienda utilizar un paño humedecido con algún producto de limpieza con base de aceite.
- Para limpiar el motor y todas las piezas que se encuentran a su alrededor, se recomienda utilizar un soplador de aire y una brocha. Con ellos quitarás el polvo y la suciedad gruesa. Luego, cubre con papel de aluminio todas las conexiones eléctricas y, usando un pequeño cepillo y un producto a base de agua, frota concienzudamente las diferentes piezas.
Lo que jamás deberías hacer
No existe una “técnica” correcta e infalible para lavar el coche pero hay algunas costumbres que pueden causarle daños a la carrocería por lo que sería mejor evitarlas. Por ejemplo, se recomienda no utilizar las estaciones de lavado automático con cepillos ya que estos pueden rayar la carrocería.
También se aconseja que no dejes los restos de insectos, de resina o cualquier otro tipo de suciedad durante demasiado tiempo ya que, al intentar eliminarla, podrías terminar despegando la pintura. Además, recuerda que todos los detergentes no son idóneos para lavar el coche ya que podrían opacar el brillo o incluso dañar definitivamente la pintura.
Finalmente, recuerda que los seguros para coches a todo riesgo pueden cubrir todos estos daños. Por ende, asegurar tu coche es una medida de prevención que nunca está de más. Además, con la llegada de Internet, podrás calcular seguro de coche en pocos minutos, comparar las diferentes aseguradoras y elegir la póliza más conveniente.