Beneficios del ejercicio en tu vida diaria

Publicado el 13 de Diciembre de 2023

En los últimos años se han realizado numerosos estudios que demuestran los beneficios de la actividad física para la salud. Por tan solo poner un ejemplo, se conoce que seguir un programa de ejercicios aeróbicos al menos durante 15 minutos al día y tres veces a la semana reduce en casi un 40% el riesgo de padecer Alzheimer después de los 45 años.

Además, se sabe que practicar deporte, aunque sea de forma amateur, previene las enfermedades cardiovasculares y el ictus, mantiene a raya la presión arterial, el colesterol y los triglicéridos y evita los problemas óseos. Por eso, incluso si tienes un seguro de vida, es recomendable que practiques actividad física de forma regular.

Las ventajas más allá de la salud física

Aunque siempre se hace hincapié en los beneficios del deporte desde el punto de vista físico, lo cierto es que existen otras ventajas que no están directamente vinculadas a los aspectos fisiológicos sino que se aprecian a nivel mental.

En primer lugar, se conoce que la actividad física reduce el estrés y la ansiedad. Cuando una persona está sometida a largos periodos de estrés, su organismo libera una serie de sustancias como la adrenalina y el cortisol que son los principales responsables de la ansiedad y la depresión. Sin embargo, el ejercicio físico reduce el efecto de estas sustancias ya que facilita la producción de endorfinas (también conocidas como los neurotransmisores de la felicidad). Además, normaliza los valores de la presión sanguínea, la respiración y el ritmo cardiaco propiciando un estado de bienestar y relajación que ayuda a combatir el estrés cotidiano.

Por otra parte, investigadores de la Universidad de Michigan están seguros de que dar un paseo entre la naturaleza manteniendo un paso rápido puede aumentar hasta en un 20% nuestra memoria a corto y mediano plazo. En realidad, se sabe que la actividad física mejora la atención, aumenta la concentración y facilita el recuerdo.

Más longevos y más fuertes

La actividad física no solo nos ayuda a prevenir enfermedades y a mantener el equilibrio psicológico sino que nos permite vivir más y con una mejor calidad de vida. De hecho, uno de los principales beneficios del deporte es que fortalece nuestro sistema inmunológico.

Existen diferentes teorías para explicar esta acción, algunas afirman que el ejercicio físico ayuda a eliminar las bacterias de los pulmones y por eso disminuye las probabilidades de contraer las enfermedades de transmisión aérea. Otras apuestan por el hecho de que el ejercicio potencia la formación de anticuerpos y glóbulos blancos, de esta forma el organismo puede detectar las enfermedades y controlarlas con mayor rapidez. También hay otros científicos que afirman que la acción benéfica del deporte se debe a que aumenta nuestra temperatura corporal impidiendo así el crecimiento de las bacterias.

Se puede presuponer que, de una forma u otra, todos estos beneficios del ejercicio físico se revierten en una vida más larga y gratificante. Diferentes estudios han demostrado que las personas que mantienen una vida activa (en la cual practican con regularidad ejercicio físico de intensidad moderada), tienden a ser más longevos y a tener una mejor calidad de vida.

Mejora de la calidad del sueño gracias a la actividad física

La relación entre el ejercicio y el sueño es profunda y compleja. La actividad física regular puede mejorar significativamente la calidad del sueño, lo que a su vez beneficia la salud general y el bienestar. Cuando te ejercitas, tu cuerpo libera endorfinas, hormonas que promueven la relajación y reducen el estrés. Este efecto tranquilizante puede ayudarte a conciliar el sueño más rápidamente por la noche. Además, el ejercicio regular puede regular el ciclo de sueño-vigilia, lo que significa que te sientes más alerta durante el día y más somnoliento por la noche, facilitando un sueño profundo y reparador. Sin embargo, es importante tener en cuenta que hacer ejercicio intenso justo antes de acostarte puede tener el efecto contrario y dificultar el sueño. Por lo tanto, es recomendable hacer ejercicio unas horas antes de la hora de dormir para permitir que tu cuerpo se relaje gradualmente.

Mejora de la autoestima y la confianza a través del ejercicio regular

El ejercicio regular no solo fortalece tu cuerpo, sino también tu mente. Al comprometerte con un régimen de ejercicio, comienzas a notar cambios positivos en tu apariencia física y en tu capacidad para enfrentar desafíos físicos. Estos logros pueden aumentar tu autoestima y confianza en ti mismo. Además, el ejercicio libera endorfinas, neurotransmisores que generan sensaciones de felicidad y euforia, lo que puede mejorar tu estado de ánimo y autoimagen. A medida que te sientes más fuerte y capaz en tu cuerpo, es más probable que te sientas seguro en ti mismo en otras áreas de tu vida. El ejercicio regular también puede ayudarte a establecer y alcanzar metas, lo que refuerza aún más tu autoestima y sentido de logro. En resumen, el ejercicio no solo fortalece tu cuerpo, sino también tu mente y espíritu, lo que te permite enfrentar la vida con una actitud positiva y segura.

Preguntas frecuentes sobre los beneficios del ejercicio en tu vida diaria 

¿Cuánto ejercicio debo hacer cada día para obtener sus beneficios?

Se recomienda al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana, o 75 minutos de actividad física vigorosa, junto con ejercicios de fortalecimiento muscular dos veces por semana

¿Puedo beneficiarme del ejercicio incluso si tengo poco tiempo?

Sí, cualquier cantidad de actividad física es mejor que nada. Incluso pequeñas ráfagas de ejercicio, como subir escaleras o dar un paseo corto, pueden tener beneficios para la salud.

¿Puede el ejercicio ayudar a mejorar mi flexibilidad y movilidad?

Sí, actividades como el yoga y el estiramiento pueden mejorar la flexibilidad y la amplitud de movimiento, lo que puede reducir el riesgo de lesiones y mejorar la postura y el equilibrio.

¿El ejercicio puede ayudar a mejorar mi memoria y función cognitiva?

Sí, el ejercicio regular ha demostrado mejorar la función cognitiva, incluida la memoria, el aprendizaje y la capacidad de atención, lo que puede reducir el riesgo de deterioro cognitivo relacionado con la edad.